lunes, 30 de mayo de 2011

¿Un OVNI nodriza sobre Manhattan?

Echando una ojeada a fotografías de OVNIs publicadas en la red de redes, me ha llamado la atención una imagen cuya forma de conseguirla me resultaba conocida. Dicha foto, que muestro seguidamente, fue obtenida en marzo de 1950 en Nueva York y en la misma se aprecia un misterioso objeto cilíndrico sobre la mencionada ciudad.



A continuación una ampliación del OVNI.


Estas dos imágenes aparecen en numerosos sitios ufológicos pero apenas se da información sobre ellas. Como mucho, sólo se indica el lugar y la fecha de obtención de la fotografía. Ante la falta de datos básicos, pregunté a Vicente-Juan Ballester Olmos qué referencias tenía, sobre dicha foto, en FOTOCAT (uno de los catálogos de fotografías OVNI más completo del mundo) y esto es lo que había:

David C. Knight, UFOs. A Pictorial History from Antiquity to the Present, McGraw-Hill, 1979, p 43. y el sitio de Larry Robinson donde se indica el autor de la fotografía (Irving Underhill) y la explicación que dio el proyecto Libro Azul: La Luna en una exposición larga.

Como la información seguía siendo insuficiente busqué en los archivos online del Blue Book, de la USAF, el expediente del caso y esto es lo que encontré.

El 2 de diciembre de 1950, la Fuerza Aérea recibió una carta del Estudio fotográfico Underhill con la fotografía del misterioso objeto celeste. El 4 de diciembre, un agente especial, John H. Smith, entrevistó a los fotógrafos y obtuvo más información.

La imagen, una vista nocturna de Manhattan, fue tomada el día 20 de marzo de 1950 en algún momento entre las 17:30 y las 18:00 horas desde un paseo peatonal de la zona de Queensboro Bridge y mirando hacia el Suroeste. La toma se hizo con una cámara de 8 x 10 y con un objetivo medio pero el fotógrafo no recuerda si fue una obturación instantánea o una exposición larga. Hay que señalar que cuando el fotógrafo hizo las tomas, no vio el extraño objeto en el cielo y no creyó que fuera un defecto de la película o del objetivo. Lo descubrió al revelar los negativos.

El Blue Book, después de analizar las fotos con dos fotógrafos y un astrónomo, concluyó que la imagen extraña fue causada por el movimiento de la Luna durante la exposición (entre 5 y 10 minutos) de la fotografía. Las variaciones del brillo a lo largo del objeto probablemente fueron causadas por el paso de las nubes, entre la cámara y el astro, durante la exposición.

La explicación que dio el proyecto Libro Azul a la fotografía es correcta. Al anochecer del 20 de marzo de 1950 era visible, en el cielo del oeste, una Luna de dos días de edad. Sin embargo, la fotografía no pudo tomarse entre las horas que indica la USAF ya que el Sol se puso, esa tarde, a las 18:11 horas locales. Más bien, la foto se hizo probablemente entre las 18:30 y las 19:00 horas, cuando estaba anocheciendo.



A las 18:45 horas la Luna, vista desde Nueva York, tenía un azimut de 90º (ubicada hacia el Oeste) y una altura sobre el horizonte de 16º. A continuación puede verse la fase que tenía nuestro satélite natural en ese momento.



El desplazamiento aparente de la Luna, durante el tiempo que estuvo expuesta la película (de 5 a 10 minutos), dejó un rastro luminoso en la misma, semejante a la simulación que he realizado con dicha fase del astro.



Una vez más, puede comprobarse que cualquier cosa es susceptible de ser tomada por un OVNI. Uno de los requisitos más importantes es, no saber qué es lo que se está viendo.

domingo, 15 de mayo de 2011

Pajarovni en Sudáfrica

Buscando un poco por Internet pueden encontrarse multitud de fotografías de OVNIs. Muchas de ellas son simples manchas o puntos que aparecen en las imágenes sin que el fotógrafo, en el momento de hacer la toma, haya visto objeto raro alguno en el cielo.

La siguiente instantánea es un ejemplo característico de este tipo de OVNIs, denominados "fantasmas", y fue obtenida en Milnerton, Ciudad del Cabo, el día 12 ó 13 de octubre del 2010. 



Como puede apreciarse en este caso, la imagen del OVNI resulta reveladora y muestra, sin duda, el vuelo de un pajarovni. O sea, un ave capturada cuando volaba lateralmente con respecto al objetivo de la cámara. Más ejemplos de pajarovnis, aquí.




miércoles, 4 de mayo de 2011

Prémanon: La historia más sugestiva de la oleada de 1954

En este pueblecito del departamento de Jura se produjo, durante la oleada francesa de 1954, una de las observaciones más conmovedoras de "platillos volantes". Los protagonistas de la misma fueron cuatro hermanos de 4 a 12 años de edad. Según el ufólogo francés Aimé Michel: "...se desarrolló en la tarde del 27 de septiembre la historia más fascinante de todo el otoño de 1954." (Los misteriosos platillos volantes, 1963, p 128)

Antes de continuar quería señalar que el caso de Prémanon tiene bastantes analogías con el pretendido aterrizaje de Fuentecén (Burgos), mencionado hace poco en este blog.

A continuación puede leerse el relato del incidente tal y como lo cuenta Michel en su libro citado anteriormente. (pp 129-133)




Dibujo del tripulante ("fantasma") del "platillo volante" y recorte de prensa tomados de este sitio.

El aterrizaje de Prémanon se convirtió en un clásico y era citado por numerosos autores. Sin embargo, años después se supo que el incidente ya había sido explicado dos meses después de ocurrido. El esclarecimiento del caso vino de un encuestador suizo, Yves Bosson de L'Association d'Etude des Soucoupes Volantes (A.E.S.V.), Vevey, Suiza.

En un informe de Yves Bosson y Michel Figuet, fechado el 27 de septiembre de 1980 (Prémanon ou l'innocence) se explica que Bosson se encontró con un antiguo dirigente del grupo COSMOS de Ginebra y se enteró de que encuestadores de éste grupo (ya desaparecido) fueron al lugar del aterrizaje el 14 de noviembre de 1954 y descubrieron que el incidente de Prémanon fue una invención de Raymond Romand, el mayor de los hermanos.

La historia del "platillo volante" salió de la fértil imaginación del pequeño Raymond que tenía que realizar una redacción, sobre los extraterrestres, propuesta por su profesora. Las huellas encontradas en el prado, y achacadas al "platillo", fueron obra del ganado (vacas y caballos).

Este fantástico relato infantil sedujo a encuestadores y estudiosos e incluso a los propios gendarmes, que quedaron convencidos de la realidad del mismo.

Otros estudiosos, como G. Barthel y Jacques Bruker (La grande peur martienne, p. 89-93), después de acudir a Prémanon también llegaron a la misma conclusión. M. Jules Romand, padre de Raymond, confirmó a los autores citados que la historia era una fantasía.También hablaron con el propio Raymond que les dijo que no hubo nada.

A continuación muestro la encuesta efectuada por el grupo COSMOS de Ginebra. El informe de Y. Bosson y M. Figuet asi como la encuesta del grupo COSMOS, donde se explica el caso de Prémanon, son cortesía de Vicente-Juan Ballester Olmos.