martes, 19 de junio de 2007

El "ovni" del 10 de febrero de 1896

En agosto de 2005 ya dediqué un artículo a este suceso. Se trata de la espectacular aparición de un bólido, en pleno día, que provocó una gran explosión y la posterior caída de fragmentos meteoríticos. Vuelvo sobre el asunto porque tengo más información del extraordinario fenómeno celeste que se produjo ese día y, como me parece interesante y esclarecedora, la traigo a esta bitácora.

El incidente de 1896 ha sido incluido por algunos ufólogos, pueden verlo en la entrada mencionada anteriormente, en las listas de avistamientos ovni. La verdad es, que hay numerosas referencias que muestran que se trató de un bólido sorprendente. Para comprobarlo, nada mejor que sumergirse en la prensa de la época. Allí aparece el hecho en su verdadero contexto.

Antes, algunas notas actuales sobre el caso:

“Hace poco más de 100 años, el 10 de febrero de 1896, en pleno día, fragmentos de un meteorito cayeron sobre varias zonas de Madrid, como Moncloa, Serrano y Vallecas. Un fragmento que acabó en el hipódromo, entonces en la Castellana, perforó el periódico “El Imparcial” que leía Javier Soravilla mientras caminaba”.

“Meteoritos. Mensajes en una roca” (Jesús Martínez-Frías / Malen Ruiz de Elvira), “El País Semanal”, nº 1136, domingo 5/7/1998. (Cortesía de Manuel Borraz)

A continuación, una breve selección de recortes de prensa de la época describiendo el fenómeno:



"El Baluarte" de Gerona, 12-2-1896




"Diario de Córdoba" 11-2-1896



"Eco de Teruel" 16-2-1896




"El Correo de Gerona" 12-2-1896


"La Lid Católica" de Villanueva de la Serena, 15-2-1896


"El Isleño" de Palma de Mallorca, 11-2-1896


Toda la prensa española de febrero de 1896 se hizo eco de este sorprendente bólido que fue visto, prácticamente, en toda la península ibérica. Pero fue en el centro (Madrid, Guadalajara, Cuenca, Albacete y Toledo) donde se mostró en todo su esplendor.

Por último, señalar el asombro que causa que esta aparición y posterior caída meteorítica sea interpretada, por algunos autores, como un avistamiento ovni a pesar de la documentación existente sobre el tema. Pero lo más desternillante es esta frase de antología que se puede leer en el relato del ufólogo, citado en la primera entrada relacionada con este evento:

“Según varios testigos presenciales, aquella luminiscencia hizo volver el día en plena noche, ante la sorpresa de los que estaban contemplando el fenómeno”. El resaltado es mío.

domingo, 3 de junio de 2007

Otro "ovni" avistado en el siglo XIX

Después de publicar la entrada sobre el bólido del 14 de febrero de 1826, observado en Campo de Criptana (Ciudad Real), Martí Flò (presidente del C.E.I.) envió a la lista de correo amigosdecdu un mensaje con una serie de enlaces donde se cita la observación manchega. Curiosamente, en dichos sitios también se alude al caso de Villaviciosa de Odón (Madrid), ocurrido el día 16 de mayo de 1851, como otra de las primeras observaciones ovni en España.


Ilustración tomada de este sitio

Iker Jiménez también lo incluye, en su libro Encuentros..., como un avistamiento ovni:

“...En unos minutos, la cruz desapareció como si se disolviera en la noche. El incidente fue comentado años después en diversos tratados históricos, debido al gran número de testigos que vieron las evoluciones del ovni y la curiosidad que suscitó.” (Pág. 337) el resaltado es mío.

En estas narraciones, se omite un dato fundamental y relevante para entender este acontecimiento: ¡Que la Luna estaba detrás de la cruz y dentro del círculo luminoso!

La crónica de la época (legajo nº 12 de alguna colección de manuscritos no especificados) del Conde de Clonard, se publicó en la revista Contactos Extraterrestres (versión española), nº 5, p. 193, y dice lo siguiente:

“Este fenómeno que representaba una cruz con su peana perfectamente recortada sin ninguna rebaba, de color blanco abrillantado, se descubría sobre un cielo completamente limpio y estrellado y la luna estaba colocada detrás, en el centro del crucero de los palos y circuía a cierta distancia este fenómeno una órbita luminosa con los colores del arco iris.
Este fenómeno fue contemplado no sólo por toda la población de Villaviciosa de Odón sino además por las personas siguientes:
(Sigue una docena de nombres)” El resaltado es mío.

En los diversos relatos del caso, vistos al principio, se dice que la manifestación luminosa duró unos minutos e incluso, en algunos, se habla de evoluciones del ovni. Datos inexistentes en el documento original, por cierto. Como verán a continuación, el fenómeno se mantuvo en el horizonte de la localidad madrileña ¡durante una hora!

En el referido legajo nº 12, con la crónica del avistamiento viene una ilustración y con ésta un texto que dice:

“Fenómeno visible aparecido en el orizonte [sic] de Villaviciosa de Odon el 16 de mayo de 1851 desde las nueve á las diez de la noche en el segundo día del plenilunio hallandose la atmósfera completamente despejada.” El resaltado es mío.

La observación de Villaviciosa de Odón, también es mencionada en un volumen del C.E.I.: Fenómenos celestes en el pasado. Siglos VIII al XIX. Barcelona, abril 1995. Y en el artículo de Manuel Borraz: Insólitos Fenómenos Celestes del pasado. CdU nº 1, pp. 4-10.

Por curiosidad, he mirado el cielo de esa noche (16 de mayo de 1851) con varios programas astronómicos y a las 21:00 horas locales, la Luna era visible a poca altura sobre el horizonte ESE. El orto de nuestro satélite se produjo hacia las 20:27 horas y la fase llena (plenilunio), ocurrió el día 15 a las 7:50 horas.


El cielo, mirando hacia el horizonte ESE, a las 21:00 horas del 16 de mayo de 1851

En el legajo del Conde de Clonard, no se narra la aparición de un ovni. Más bien, se describe la visión de un halo lunar de 22º de radio. La ilustración, incluida en el susodicho documento, no sería una reproducción exacta del fenómeno y estaría, probablemente, influida por las creencias religiosas de la época.

A continuación pueden ver un dibujo, más realista, de un halo lunar observado, en un viaje en globo de Paris a Arcachón, en marzo de 1875.



Manuel Borraz, metódico y certero como siempre, señala lo siguiente sobre esta cuestión (comunicación personal, 20-5-2007):

“La cruz estaría formada, muy probablemente, por un fragmento de círculo parhélico (trazo horizontal) y un pilar de luz (vertical), enmarcados por un halo de 22º (radio angular).

La ilustración no debería tomarse como una copia fiel del fenómeno. Si se trató de un halo lunar:
- las proporciones estarían falseadas;
- la posición de la Luna, descentrada;
- el orden de los colores en el anillo (halo principal) estaría invertido; - la figura estaría, presumiblemente, completada, pues no podría verse el halo de 22º entero, dada la escasa elevación de la Luna sobre el horizonte (4º-13º, durante la observación).
- los trazos luminosos no estarían tan nítidamente definidos.
Etc.”

Otra ilustración de un halo lunar, ésta, también, mucho más realista que la de Villaviciosa de Odón. Es una acuarela reproducida en blanco y negro en el libro "The nature of light and colour in the open air" de M. Minnaert (Dover, New York, 1954), lámina IX(b). (Cortesía de Manuel Borraz Aymerich)


Para finalizar, en este sitio pueden encontrar más información, y muy pormenorizada, sobre este fenómeno atmosférico.